El primer ministro Justin Trudeau reemplazó a Chrystia Freeland por Dominic LeBlanc, quien es un amigo cercano.

La viceprimera ministra de Canadá, Chrystia Freeland, dimitió en la noche de este lunes por diferencias con el primer ministro Justin Trudeau acerca de cómo manejar la amenaza del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer aranceles del 25 por ciento a los productos canadienses.

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A través de la red social X, Freeland dio a conocer de discrepancias significativas sobre la dirección que debía tonar Canadá.

Las tensiones entre ambos políticos aumentaron en torno a una reciente propuesta que incluía una exención fiscal de dos meses y cheques de 175 dólares para algunos canadienses, ante lo cual Freeland consideró que era un gasto inadecuado frente a la grave amenaza arancelaria.

En ese sentido, expresó “eso significa evitar costosos trucos políticos, que no podemos permitirnos y que hacen que los canadienses duden de que reconozcamos la gravedad del momento”.

Asimismo, en su carta de renuncia destacó “nuestro país se enfrenta hoy a un gran desafío. La nueva Administración estadounidense está aplicando una política de nacionalismo económico agresivo”.

“Eso significa mantener seca hoy nuestra pólvora fiscal, de forma que tengamos las reservas que podríamos necesitar para una próxima guerra arancelaria”, agregó.

Freeland, quien ha ocupado diversos cargos ministeriales desde que Trudeau asumió el poder en 2015, mencionó que le ofrecieron recientemente otro puesto dentro del Gabinete, pero llegó a la conclusión de que la única opción honesta era renunciar.

Su salida marca un cambio significativo en el liderazgo del Gobierno canadiense en un momento crucial, a medida que el país se prepara para enfrentar posibles desafíos económicos.

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